A la hora de planear una reforma es importante tener en cuenta una serie de cuestiones para que esta se desarrolle del mejor modo posible. Valores como la sostenibilidad, los plazos de ejecución y la elección de los profesionales conseguirán que la reforma de tu vivienda sea un éxito total. Lo primero que debemos saber es que hay que reflexionar con tiempo suficiente antes de ponerse manos a la obra. Esto hará que nos ahorremos molestias y dinero.
¿Cuánto cuesta reformar?
Desde la empresa Habitissimo aconsejan detectar si existen grietas, desniveles o fisuras, así como manchas de moho o humedad. En estos casos, es recomendable consultar con personal cualificado como un perito para valorar el estado de la vivienda. También apuntan que el presupuesto suele ser muy personal y que dependerá de los metros cuadrados de la vivienda y de la calidad de materiales elegidos. Así, puede haber reformas que asciendan a 1.000 €/m² y otras que apenas lleguen a los 100 €/m².
Los datos aportados por Quotatis revelan que «los proyectos más populares son la reforma integral de vivienda, con una media de 33.000 euros por proyecto, la reforma de baño (2.450 euros por proyecto), la reforma de cocina (4.300 euros) y pintura integral (750 euros)». Hay que exigir presupuestos detallados para que cualquier modificación no suponga un dolor de cabeza y un incremento en el coste total.
Vigilar el presupuesto
Desde Sto detallan que, «el mayor miedo suele residir en el coste de la reforma y en procurar no gastar más de lo que se tenía pensado. Esto se produce a causa de que muchos no tienen en cuenta en un primer momento las tasas y licencias a pagar y otros gastos adicionales, como los contenedores, sacos, transportes, etc. De ahí la importancia de desglosar absolutamente todo en el presupuesto». Desde Quotatis afirman que «un precio demasiado bajo puede ser consecuencia de un profesional no dado de alta».
Todas las empresas consultadas consideran que es positivo tener en cuenta las sugerencias de la empresa que llevará a cabo la reforma porque, aunque ya se tenga una idea, el profesional siempre podrá dar buenos consejos, así como algunos trucos desconocidos. Desde ISOVER recomiendan hacer un cálculo de costes a largo plazo y señalan que, «es importante el desarrollo de nuevas soluciones constructivas que se adapten tanto a obra nueva como a rehabilitación y que permitan dotar al edificio de la eficiencia energética requerida».
Buena planificación
Desde Andimac alertan de la importancia de planificar una buena reforma. Hay mucha gente que se plantea si irse de viaje o reformar la casa, invertir en un buen coche o realizar mejoras en el hogar, etc. Es importante crear consciencia y cultura de que una inversión en el hogar mejorará nuestras vidas. «El dinero destinado a las reformas no es gasto, es inversión con retorno en calidad de vida y bienestar«, según Santiago Molinero, secretario general de la Asociación Nacional de Distribuidores de Cerámica y Materiales de Construcción (Andimac).
Por otro lado, es habitual albergar ciertos temores a la hora de llevar a cabo una reforma. Por ejemplo, es muy común tener miedo a no encontrar el profesional adecuado o a que no se cumpla con los plazos establecidos. Otro freno son las posibles molestias a los vecinos. Según la legislación, se deberá avisar al presidente de la comunidad sobre las obras.
Más segunda mano, más reformas
Según los datos aportados por Andimac, España gastará hasta 17.514 millones de euros en reformas en 2018. El gasto medio de cada vivienda podría ascender hasta los 713 euros. En cuanto a las causas que provocan este crecimiento tenemos como principal el envejecimiento del parque de viviendas, ya que el 81% de las viviendas tienen más de dieciocho años de edad.
Otra causa es el auge de la compraventa de segunda mano, que hace urgente realizar ciertas mejoras en el inmueble para adaptarlo a las necesidades de los nuevos inquilinos. Además, el modelo familiar está cambiando y se están potenciando las viviendas unifamiliares. Igualmente, el envejecimiento de la población hace que se necesiten reformas para mejoras el acceso a las bañeras o a ciertas estancias del hogar.
Los detalles del contrato
El contrato de reforma debería contener el precio, la forma de pago, las calidades del servicio, la fecha de entrega de la obra, garantías como las penalizaciones por retraso, etc. El objetivo es proteger al máximo los intereses del particular y asegurarse de que la reforma se realice correctamente. Además, desde Habitissimo afirman que hay que asegurarse que la empresa que realiza la reforma integral cumpla con la normativa vigente y cuenta con un seguro de responsabilidad civil.
Además, Sto señala que, «lo ideal es que el contrato incluya los datos de la empresa encargada de realizar la reforma (CIF, nombre y domicilio fiscal) y de los de los propietarios. También las prestaciones finales de los sistemas que queremos instalar y las garantías de instalación«.
Obras mayores vs obras menores
Molinero clasifica las obras en dos tipos. Por un lado, están las obras mayores, que suelen ser las que implican modificación o alteración de la estructura, un cambio de uso o una alteración de elementos comunes: «Resulta bastante habitual que estas obras requieran un técnico colegiado que las realice y una licencia del ayuntamiento correspondiente, al margen de los permisos de la comunidad», señala.
Por otro lado, están las obras menores, que únicamente implican cambios en el interior de la vivienda, sin afectar al resto del edificio ni de los vecinos. Molinero declara que «este tipo de obras no suelen necesitar ninguna licencia, sino que se tramitan como una comunicación. De hecho, bastaría con presentar la documentación que estipule el ayuntamiento en cuestión para iniciar la reforma». Asimismo, desde ISOVER recomiendan que, aunque suponga un coste extra, siempre es recomendable contar con un arquitecto.
En cuanto a las principales reformas que se realizan en los hogares españoles, todos los expertos consultados consideran que son las de baños y cocinas, destinándose la gran mayoría del presupuesto a materiales y equipamiento, como puertas, azulejos, tarimas, sanitarios, grifería, muebles y accesorios de baño, electrodomésticos y muebles de cocina. Dentro de las más demandadas, las reformas suelen abordarse con el objetivo de la renovación del inmueble, bien para optimizar espacios o, simplemente, porque se quiere dar un toque más moderno a la vivienda.
Las ayudas del Plan de Vivienda
Gracias a las ayudas individualizadas del Plan de Vivienda, la demanda de reformas será mayor a corto y medio plazo. Desde Habitissimo manifiestan que «dentro de las ayudas para la conservación, seguridad y accesibilidad están contemplados los gastos relacionados con el arreglo de cubiertas, fachadas y medianerías, cimientos o estructuras, instalaciones de ascensores, rampas, etc.». La cuantía máxima de esta ayuda por vivienda es de 3.000 euros cuando sean obras de conservación y hasta 8.000 euros cuando sean mejoras de accesibilidad, pudiendo llegar a los 14.000 euros por casa para personas con discapacidad.
Además, las ayudas no van a poder superar el 40% de la inversión o el 75% en el caso de rentas bajas y personas con discapacidad o de más de 65 años. Para las reformas energéticas, la cuantía máxima no superará los 12.000 euros para viviendas unifamiliares y 8.000 euros para pisos. Estas ayudas se concederán en convocatorias públicas realizadas por las Comunidades Autónomas.
Desde Andimac consideran que «ya que por primera vez las ayudas están disponibles para las reformas interiores de las viviendas y no solo para la rehabilitación de los edificios, se impulsarán el número de reformas por encima del millón y medio de casas que se reformaron en 2017» y que en torno al «55% de las viviendas podrían beneficiarse de las ayudas del Plan Estatal 2018-2021. En concreto, podrían aprovecharlas unos 13,7 millones de viviendas de las casi 25,7 millones que integran el parque inmobiliario en España».
Fuente : Pisos.com – reedac : M.Arenas – https://www.pisos.com/aldia/como-planificar-la-reforma-ideal/1628088/
