El estilo Zen en decoración

Son muchas las corrientes decorativas que Occidente ha importado desde otras partes del mundo y el estilo zen es una de ellas. Lo que a priori pudiera parecer un estilo decorativo más es, en realidad, toda una filosofía de vida. Y no es de extrañar. Sus orígenes se sitúan en las enseñanzas de buda allá por el siglo VI a.C., así como en los mantras del Hinduismo. Sin embargo, fue el imperio nipón el que le brindó su máximo esplendor a mediados del siglo XIII.

El equilibrio, el orden y el confort son tres de los pilares sobre los que se asienta el estilo zen, una corriente que alcanzó su máxima expresión en Japón a mediados del siglo XIII y conquista occidente

Como la mentalidad y cultura tradicional de la época, también Occidente cayó rendido a los encantos de este estilo aunque para que eso ocurriera, hubo que esperar varios siglos. Fue a finales del siglo XX cuando su influencia se evidenció en disciplinas como la arquitectura o la decoración. A partir de entonces, conceptos como la armonía, la paz interior o el equilibrio, comenzaron a ganar peso en el diseño.

Su origen oriental da a esta corriente una idiosincrasia muy particular que, en ocasiones, imprime a los espacios cierto aire masculino. Este tipo de decoraciones se caracterizan por hacer gala de un orden escrupuloso y una buena planificación. Esta singularidad propicia una armonía general y, por momentos, recuerda a los preceptos minimalistas.

Ambos estilos se basan en la simplicidad. Sin embargo, el estilo zen añade la amplitud espacial y la libertad de movimientos en los interiores como elementos imprescindibles de diseños que abogan por el equilibrio, el orden y el confort.

Su origen oriental da a esta corriente una idiosincrasia muy particular que, en ocasiones, imprime a los espacios cierto aire masculino. Este tipo de decoraciones se caracterizan por hacer gala de un orden escrupuloso y una buena planificación. Esta singularidad propicia una armonía general y, por momentos, recuerda a los preceptos minimalistas.

Ambos estilos se basan en la simplicidad. Sin embargo, el estilo zen añade la amplitud espacial y la libertad de movimientos en los interiores como elementos imprescindibles de diseños que abogan por el equilibrio, el orden y el confort.

Entre las características más representativas del estilo zen está el uso de colores claros, la luminosidad, la apuesta por materiales naturales o la ausencia de un exceso de ornamentación

En el capítulo de los materiales encontramos otro de los rasgos identificativos de esta decoración. La apuesta por las materias primas y tejidos naturales o poco industrializados es un must have. Piedra, maderas claras como el bambú, el fresno o la haya, algodón… Las opciones son extraordinariamente ricas.

Con independencia de si estás pensando en decorar el salón, el dormitorio o cualquier otra habitación, el mobiliario es otro de los aspectos a tener en cuenta. Las líneas rectas se imponen sobre las curvas aunque, en todo caso, se buscan los acabados depurados y la simplicidad. Las piezas de poca altura son imprescindibles en cualquier estancia, ya sea en forma de sofás, sillones y mesas, o como camas, mesillas y similares.

Sin caer en excesos las plantas suelen estar presentes en espacios decorados con estilo zen. De hecho, no es extraño encontrar arreglos florales salpicando cualquier estancia. Tal vez sea el gusto por los aromas lo que impulsa su presencia aunque, en este caso, la decoración se sirve de otros recursos para conseguir ese ambiente zen. El incienso y las velas con aromas suaves son imprescindibles para crear esa atmósfera evocadora propia de este estilo.

Llegados a este punto podrás imaginar que la decoración zen huye del exceso de ornamentación. Los adornos son pocos y bien elegidos: desde cuadros con motivos geométricos, hasta jarrones de cristal, pasando por accesorios de inspiración budista. En todo caso, es importante que los espacios sean abiertos y luminosos, empleando soluciones como biombos o puertas correderas traslúcidas para propiciar esa amplitud.

¿Qué te parecen estas ideas para trasladar el estilo zen a la decoración de tus interiores?

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